30.11.03

Sueño XLVII: Vuelvo a casa y encuentro a un chica de la cual estuve enamorado hace muchos años, pero no me hizo caso en su momento. La veo en una esquina cerca de mi casa, la saludo y cuando nos damos dos besos, yo se lo doy en la boca y espero una mala reacción por su parte. Al no recibirla, le pregunto por qué no se enfada, y me dice que eso es lo que tendría que haber hecho hace mucho. Así que la vuelvo a besar en la boca.

27.11.03

Sueño XLVI: Estaba asomándome hacia el patio de la escuela, desde el segundo piso del edificio, apoyada sobre el barandal. En eso, una amiga que se llama Adda me gritaba desde abajo que ya casi serían las vacaciones, que deberíamos tomárnolas para ir a la playa. En eso, ella estaba sosteniendo un gran pedazo de sandía y yo sentía una punzada en el cuello, un dolor terrible, un zumbido en los oídos, no feo, horrible. Me sentía inmovilizada, cuando escuché una voz detrás de mí. Pude voltear y ver que era Jesucristo. En eso, todo se regresó y debajo estaba Adda que me decía que teníamos que irnos de vacaciones a la playa, después sacaba el gran pedazo de sandía y le daba una mordida.

26.11.03

Sueño XLV: Me encuentro por la calle, y de boda, a dos compañeras de oposición a las que les pregunto que si no van a ir al preparador, que ya es la hora. Me responden que sí, que ahora irán. Yo no llevo preparado nada, y voy con cierto reparo.Me abre la puerta D.M., que tiene pinta de Papá Noel, aunque descubro que de repente ha perdido unos kilitos. Me agarra de la mano y me invita a tomar algo en un bar que hay a la entrada de su casa. Pasamos luego a una sala dónde hay personas que no conozco de allí, pero sus caras sí me resultan conocidas. Una de las chicas empieza a cantar un tema, se equivoca y de repente la tiran a una especie de pecera con piedras en el fondo, dónde ya está otro.Dentro está La Sirenita, su amigo el cangrejo y la bruja mala que le roba la voz. Empiezo a ponerme nerviosa, pero D.M. me da la mano y con cariño me saca de allí.Me siento protegida.Respiro aliviada, y despierto.

24.11.03

Sueño XLIV: Soñé con una amiga. La besé y ella me besó muy despacio. Me excitó y se excitó ella también; había más gente, pero no recuerdo quiénes eran. Nos fuimos a una habitación: la sigo besando; me senti caliente, la oía gemir y eso me calentaba más; le bese el cuello, me pedía que siguiera, le tomé sus pechos pequeños y los saboreé, sentí como se le paraban en mi boca; la desnudé, le vi su sexo sin vellos, le empece a lamer y lamer, sentí un sabor acido y caliente, estaba muy mojada, muy rica, no queria parar... le metía los dedos y la lamía más... Me vine.

22.11.03

Sueño XLIII: Caminando por mi casa, los pasillos se ven tan solos, tan rutinarios, sin embargo no es normal, algo falta, algo sobra...
Salgo a la calle, mi vecino me señala, salen todos de los alrededores, me señalan, gritan, comienzan a seguirme; el miedo invade todo mi cuerpo, y yo, instintivamente, comienzo a correr, corro hacia el centro de la ciudad. Allí todos me siguen. Desesperado, no sé que hacer; corro con todas mis fuerzas a un estacionamiento, me escondo debajo de un automóvil, todos pasan, no me ven, se van todos. Sin embargo, cuando pensaba que estaba más seguro, me encuentran y me tienen contra la pared...

20.11.03

Sueño XLII: Tenía que comprar unos zapatos nuevos, porque eso señalaría la diferencia entre vivir con mi familia y vivir sola. Ahora vivía sola. Recorrí calles en busca de zapaterías, vi modelos y modelos, extraños zapatos en vitrinas decoradas a propósito con telarañas. De pronto recuerdo a una tía mía, recuerdo que es anciana y sé que al recordarla eso significa que ella está llamándome. Recorro las calles empedradas con unas botas rojas o tintas hasta la pantorrilla, como si el recuerdo de mi tía que me llama fuera un aroma que puedo seguir, llego hasta una puerta enorme de madera. Es un hotel. Creo que lo que debo hacer es buscarla allí. La situación es desesperante pues sé que mi tía anciana está pasando por algún tipo de sufrimiento. En eso, una multitud murmulla y grita, no tan lejos, ni tan cerca. Me acerco. Resulta que en la plaza pública de ese pueblo (o ciudad) en lugar de una plaza grande existe una piscina enorme, ahí se ha ahogado un niño mientras un acto festivo se realizaba. Todos los personajes de gobierno estaban presentes, mujeres con joyas, señores millonarios, Arnold Schwarzenegger, pura farándula. Por alguna razón, entendí que el niño se había ahogado mientras todos contemplaban el acto, sin que nadie quisiera ayudarlo, más bien, era algo entretenido para todos, como un show más.
Voltée a ver a la madre del niño, una vieja gorda vestida de blanco y rojo, en calzones y fumando algo del tamaño de un bastón. Abrió su boca maquillada y me dijo: "tu tía ha muerto" y echó a reír. Yo corrí tratando de llegar de nuevo hacia la enorme puerta, el hotel. Nunca pude hacerlo, desperté.

19.11.03

Por favor, si sois tan amables, os pediría que me siguieráis enviando sueños para colaborar con esta bitacora, puesto que me he quedado sin reservas y sin vuestra ayuda no puedo avanzar.

Como ya sabéis, se trata de que me enviéis lo que habéis soñado: no importa cuán extraño o fuerte sea, se publicará de todas formas. Mi correo es correuabandonat arroba hotmail punto com. Podéis añadirme al messenger si queréis. Una vez enviados, yo los subo sin indicar de dónde proceden, así el anonimato del soñador está asegurado.

Os animo a seguir, pues, colaborando con este blog.

10.11.03

Sueño XLI: Estaba en la casa del pueblo de mi familia, con mucha gente desconocida. Entraba en uno de los dormitorios y cogía una galleta de fresa, sentía que me seguía alguien y me escondía debajo de la cama. La chica que me seguía me encontraba y me pedía la galleta; yo le decía que a cambio de un beso en la boca. Ella accedía y se lo daba.
En el mismo escenario, mi padre ha tenido que cambiar de cuerpo y le han transplantado la cabeza a otro cuerpo similar. Cuando llega la hora de irnos, tenemos un cuerpo sin cabeza sentado en un sillón, así que le digo a mi padre que "le tenemos que tirar a la basura" (refiriéndome al cuerpo) y entre mi madre y otra persona lo recogen, lo arrastran y salen a la calle con el cadáver. Yo estoy con un antiguo amigo del pueblo y le pregunto si es normal salir a la calle a tirar a la basura un cadáver acompañado de toda la familia; no sé qué me responde.

8.11.03

Sueño XL: Me desperté sobresaltada porque tuve la sensación de que alguien dormía a mi lado. Abrí los ojos en la penumbra y de inmediato noté su cercanía y empecé a sentir su piel. Pero no me asusté. Aquella sensación no me produjo ningún rechazo. Es más, de repente era yo quien, poseida, tomaba la iniciativa. Besaba su cuerpo desnudo, recorría con mi lengua sus senos, sus manos, su cuello. Pero no podía distinguir su rostro. Era sólo un cuerpo. No tenía cabeza. Después me di de bruces con su vulva. "Pero si a mi no me gusta comer coños", pensé. Y aún así continué con aquella especie de aventura fascinante que me enloquecía. Estaba excitada. Terriblemente excitada.

7.11.03

Sueño XXXIX: Estaba en mi habitación y miraba por la ventana. Era de noche. En la calle había aparcados dos coches negros muy grandes: uno era una furgoneta que ocupaba parte de la calzada. El más próximo era un coche de difuntos. De él salían dos personas, una de ellas era una niña de unos doce años que decía que aún no había comido y que tenía hambre. Yo enseguida pensaba que eran vampiros y para ocultarme, cerraba todas las luces y las persianas, pero cuando lo hacía reparaba en que quizá me estaba delatando haciéndolo delante de ellos. Más tarde, veía que eso era un sueño y se lo contaba a mi hermana.

5.11.03

Sueño XXXVIII: Estaba yo en un chiringuito playero, con la diferencia que no estaba en la playa sino en medio de una gran ciudad. A mi lado había un niño pequeño que parecía del sudeste asiático y detrás mío la chica de la barra hablando con ¿George Clooney? Sigo. Me voy del chiringuito, con cara de amargada o algo así -a lo mejor por haber visto a George Clooney-. Entonces todo se convierte en una escena de persecución lenta. Me explico: yo voy andando y veo que George Clooney me sigue. Yo deduzco que quiere decirme algo, no sé el que, pero parecía todo muy en plan"¡No te vayas, no puedo vivir sin ti!". Como no te persigue un sex symbol todos los días, yo andaba despacito para que el Clooney llegara antes y no se cansara demasiado. Pero no llegaba nunca, yo miraba de reojo e iba viéndolo entre la gente pero nada, que no le ponía ímpetu el chaval. Me cansé y me paré, me puse un poco teatrera y haciendo ver que me mareaba para ver si al menos se ponía a correr. Me giré disimuladamente y vi que venía corriendo, pero a cámara lenta. Me cansé de esperar y me fui a coger el metro.

4.11.03

Sueño XXXVII: Estaba paseando con un grupo de gente por el casco antiguo de mi ciudad. Como en todos los sueños, nada es igual que en la vida real, pero eso no impide que nos creamos que si. Bueno, pues iba yo por el casco antiguo de Lleida que evidentemente no se parecía en nada al verdadero - era más similar a Berlín al finalizar la IIGM- sorteando casas bombardeadas y ruinas romanas.

Entonces llego a un edificio muy viejo y descuidado pero aún de pie. Desde allí podía ver toda la plaza de San Juan. El edificio en si parecía una mezcla de fábrica del siglo XIX e institución franquista, algo sórdido y decadente. Por dentro parecía un dormitorio de monjas o una enorme sala de hospital de la Edad Media, a escoger. Tenía arcadas muy altas y hacía mucho frío -eso me pasa por no haber bajado aún la manta del trastero-. En vez de camas había centenares de estanterías bajas donde había miles de objetos que yo deduje que eran fenicios... No puedo describir el mal rollo que daba el lugar y sobretodo el de esa estatuilla rara que había decidido quedarme. Quedaba todo muy "Laia Jones y la estatuilla maldita", así que dejé la estatuilla donde estaba y salí de la fábrica-museo.

3.11.03

Sueño XXXVI: Estoy en la calle, bajo un edificio. Miro hacia arriba y veo a una niña asomada a un balcón. Sé que habla inglés y empiezo a decirle hola, a preguntarle cómo se llama... esas cosas. La niña me mira, y a veces se esconde. De pronto deja de esconderse y yo, de mirar hacia arriba. Y cuando vuelvo a hacerlo, la niña está cayendo del edificio a la acera. Me acerco a ella; está tumbada boca a abajo. Lleva un camisón blanco y no es tan niña como pensaba. Es una chica muy menuda. Y está a todas luces muerta. Le doy la vuelta, no quiero que su cara (era muy bonita) esté en contacto con el suelo lleno de mierda. Tiene los ojos abiertos y se los cierro. Pero cuando la levanto para acostarla en su cama, se le abren, como a las muñecas chochonas. No pesa nada y me la llevo en brazos, la acuesto y de pronto vuelve a respirar. No sabe dónde está, y tampoco sabe hablar.

1.11.03

Sueño XXXV: He soñado que volaba fugazmente a través de laberintos de hierba en tres direcciones, como si fuera un grabado de Escher, puesto que los pasillos se extendían arriba y abajo, a izquierda y derecha. En el sueño tenía el control de mi vuelo, era muy lúcido, y me dirigía a donde quería.