13.7.04


Sueño 93: Estoy en una hacienda o gran casa rural, que ha sido convertida en monasterio donde sólo habitan monjes. Es de noche. Yo miro por una de las puertas y veo un coche a lo lejos cuyos viajeros miran en dirección al monasterio. El coche se pone en marcha, y sigue un sendero hasta aparcar. Yo, atemorizado -soy el jefe del monasterio- llego a la puerta y paso el cerrojo antes de que nadie pueda entrar. El coche está delante de la puerta, con las luces apagadas.

Después, encuentro una especie de mapa que indica que el monasterio está en un bosque y que, desde la colina de detrás, se divisan todos los alrededores. Decido subir a ella para ver si puedo atrapar al intruso que sé que está rondando el lugar. Aquí empieza a apoderarse de mí un sentimiento de angustia: empiezo a subir a gachas. La textura del suelo es como de goma, como si fuera colchón hinchable. Es noche cerrada: no se ve ni se oye absolutamente nada. Lo único que hago es dar palos en la más completa negrura. De repente, oigo como una respiración y un movimiento y empiezo a golpear e insultar ("¡Hijo de puta! ¡No escaparás!") en la dirección en que he oído el movimiento. Me despierto terriblemente asustado.

12.7.04

Sueño 92: En el valle de un bosque han encontrado el cadáver de una joven y del que parece su hermano, pero que finalmente se descarta que sea él. Yo soy parte de la investigación y conozco al padre de la chica muerta; estoy muy triste y con ansias de vengarme. El valle tiene una vegetación muy poblada -parece selva vietnamita-, pero parece que se ha establecido un rastro del asesino. Aclaramos por donde fue que el criminal cruzó un riachuelo o alguna frontera natural del bosque. Los que investigamos llegamos a una habitación vieja, como de mantenimiento, llena de estanterías de metal viejas y libros. Hay una extraña pista de libros puestos al revés y partes de abajo de algunos estantes marcados en lápiz que nos hacen pensar que hay algun mecanismo secreto para abrir una puerta. Así que retiramos algunos estantes llenos de polvo, pero sin ningún resultado.
De repente, me doy cuenta de que cerca de la habitación hay un pasillo. Lo reviso por pura rutina y no veo nada. Pero, un momento después veo lleno de terror que hay una verja que da a la calle; está abierta y cerca de ella, una figura de hombre bajito -se parece a Charles Bronson-, vestido de traje negro, comienza a caminar a paso rápido hacia nosotros. Yo lo identifico con el asesino y grito con todas mis fuerzas "¡Alto! ¡Deténgase o disparo! ¡Alto!", pero no hacecaso. Así que aprovecho un momento de distracción -se cruza en su camino una vieja, o una niña, no veo bien-, saco la pistola y le disparo dos veces. Él hace lo mismo y me dispara, yo intento ponerme a cubierto, pero creo que le he dado. La escena se desvanece...

Artwork by Edwin Daniel

3.7.04

Art by Edwin Daniel

Sueño 91: Soñaba que me iba, como tantas veces, de acampada. Llevaba la mochila en la espalda. Esta al principio no pesaba casi nada. Cuando estaba apunto de llegar a mi destino, una pinada cerca de mi pueblo. Me encontré que toda la zona estaba llena de tiendas de domingueros, con sus paelleras, su música a toda pastilla y sus gritos.

A mi lo que me apetecía era pasar un fin de semana solo en los pinos. Así que, antes de llegar, me di la vuelta para buscar una ruta alternativa... ir a otro sitio. Pero en ese momento, la mochila comenzó a pesar de una forma casi sobrenatural. Intenté quitármela pero no podía.

Salí corriendo, asustado, dando tumbos por el peso, acercándome a la playa.

Entonces, una enorme ola negra se abalanzó sobre mi arrastrándome una corriente muy fuerte. Era como chapapote y aun pesando tanto la mochila no me hundía... pero si me sentía cansado de tanto luchar contra las olas negras... fue cuando desperté.